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Si habéis visto alguna vez la serie The Big Bang Theory, esa de unos geeks que son vecinos de una chica muy guapa, sabréis que el personaje de la vecina, la chica guapa, trabaja en un restaurante llamado Cheesecake Factory. Este restaurante es una cadena que está por todo Estados Unidos.
Como podéis adivinar por el nombre, el mayor reclamo de este restaurante son los Cheesecake, o tartas de queso. No sabría decir cuantas tartas diferentes tienen, pero son muchas y a cada cual más apetecible. Aparte del restaurante tienen una tienda donde comprar estas tartas de queso para llevar.
Además de esto otro gran reclamo de Cheesecake Factory es su extensa carta. Y cuando digo extensa digo que es realmente brutal. Tienen de todo en un montón de variedades. Y no solo la carta es grande sino que sus platos son realmente tremendos en tamaño. Tanto que una persona normal es incapaz de terminárselo sin acabar con una indigestión.
En mi obligado paso por el restaurante me decidí por la Smokehouse B.B.Q. Burger. La hamburguesa constaba, entre otras cosas, de una buena porción de carne, aros de cebolla fritos, bacon crujiente, queso cheddar y salsa barbacoa. Como veis en la imagen de arriba el tamaño de los aros de cebolla era inhumano.
Se podría decir que la especialidad de Cheesecake Factory, aparte de las tartas, es el tamaño. No es que la hamburguesa estuviera mala, que no lo estaba, pero sí que se apreciaba que se esmeraban más en que fuera gigante a que estuviera realmente rica. Era una hamburguesa que no estaba mal, pero no es una hamburguesa que uno recuerde el resto de sus días. Todos los ingredientes estaban en su sitio, pero nada más.
A continuación os dejo con fotos de otros platos y como no, algunas tartas de queso.